Le preguntamos a un experto ¿Cómo acudir correctamente en un momento donde sé dé un ataque canino por mordedura? Su respuesta fue: “Lo más importante que debemos tener en cuenta, como en cualquier situación de riesgo, es mantener la calma” Óscar Vargas, director de UNIVERZOO Animal.
Óscar Vargas es adiestrador certificado profesional y también es el director operativo del centro de comportamiento animal UNIVERZOO Animal, lugar en el que educan y adiestran familias multiespecie, perros y gatos, con especialidad en la modificación de conducta.
Tenga en cuenta
El alterarnos y generar movimientos de tipo brusco o rápido puede generar que el ataque sea peor, es decir, que creen desgarramientos o en algunos casos desmembramientos, llevando la situación a una situación extrema.
Por lo regular a los perros no les gusta atacar, ellos utilizan la mordedura como último signo para intentar persuadir, ahuyentar o alejar la persona o circunstancia que lo está llevando a ese comportamiento.
De manera que cuando vemos que un perro dirige un ataque hacia nosotros, o principal que se debe hacer es permanecer quietos, no intentar correr porque él en momento que se corre se activa un instinto de presa que el perro puede tomar como un reforzador para morder con mayor fuerza, de manera que la mejor decisión es quedarse quieto. Si el perro ya está sujetando la persona o ya ha mordido lo que se debe intentar es generar un tipo de asfixia al perro para que este abra la boca, no se debe jalar al perro, mucho menos pegarle, ni echarle agua porque estas acciones solo van a generar que se aumente el instinto de ataque y pueda ser que la mordedura sea mucho peor.
Proceda de esta manera
Para generar asfixia al perro que está mordiendo, lo ideal es conseguir un lazo, trapo, saco o cualquier elemento que se pueda pasar alrededor de la garganta del animal y de esta manera generar el asfixiamiento que provoque en el animal que abra su boca y poder liberar a la persona o animal que está mordiendo.
¡No lo haga!
No se recomienda pegarle con ningún objeto, ni levantarlos de las patas o intentar apretarle los testículos al perro si es un macho y mucho menos echarle agua, porque todas estas acciones pueden generar un acercamiento al individuo que está agrediendo y se cree un ataque cruzado, es decir que cuando usted intenta alguna de esta acciones lo único que va a conseguir es que el perro redireccione su mordida hacia usted.
La segunda razón para evitar accionar de esta manera se debe a que estas acciones aumentan el instinto en el perro, crezca mucho más, es decir que desee apretar con mayor fuerza porque él tiene a su presa y quieren quitársela, entonces va a apretar con mayor fuerza para evitar que se la quiten, de manera que el perro va a intentar ciertos movimientos para desmembrar o arrancar el pedazo de piel que está sujetando con su boca.