El paro nacional, las desmovilizaciones indígenas, las amenazas, conflictos de tierras y violencia de genero, entre otros factores de conflicto, matizan la labor de la Defensoría Nacional del Pueblo. Y al frente de estas responsabilidades en Risaralda está alguien que se ganó el cargo por puros méritos. No es fácil rebuscarse la vida en Estados...