El transporte intermunicipal hacia el departamento de Chocó y el municipio de Pueblo Rico se encuentra suspendido desde hace 11 días debido a la alteración del orden público en la región. Las empresas de transporte tomaron esta decisión después de que tres vehículos de la empresa Flota Occidental fueran incinerados en la vía Panamericana, que conecta ambos departamentos.
El incidente más reciente ocurrió el pasado 27 de mayo, en el sector conocido como Bochoroma, cerca de la entrada a la población de Buratá, en el municipio de Tadó. De igual manera el viernes 19 de mayo, en el sector conocido como Playa de Oro, ubicado en la vereda del Tapón, en el departamento del Chocó, otros dos vehículos de la misma empresa de transporte fueron incendiados.
Ambos actos terroristas fueron perpetrados por hombres armados que detuvieron los vehículos y obligaron a los pasajeros a descender antes de prenderles fuego. Afortunadamente, no hubo personas lesionadas, pero si cuantiosas pérdidas, pues los tres vehículos quedaron completamente destruidos.
Ante esta situación, la semana pasada se desarrolló una reunión extraordinaria en las instalaciones del Batallón de Artillería de Campaña N.°8 San Mateo. En la reunión participaron los gerentes de las empresas de transporte que cubren la ruta Pereira-Quibdó, el gerente de la Terminal de Transportes de Pereira, la Secretaría de Gobierno Departamental, el departamento de Policía de Risaralda y el Ejército Nacional, con el objetivo de coordinar esfuerzos para reforzar la seguridad hasta el corregimiento de Santa Cecilia en Pueblo Rico.
Además, se presentó una solicitud al Ministerio de Defensa para fortalecer la seguridad en el departamento de Chocó.
“Estamos a la espera de que se realice otra reunión esta semana, la idea es incluir también al comandante del batallón de del departamento del Chocó para tomar acciones reales para proteger a los conductores, transportadores y lógicamente los usuarios”, aseguró el gerente de la Terminal de Transportes de Pereira, Héctor Fabio Artunduanga Mejía.
Hasta el momento, esta suspensión del transporte ha afectado a unos 450 usuarios diarios. Asimismo, el comercio y los transportadores también han sufrido las consecuencias, generando un impacto negativo en la economía de la región. Se espera que las autoridades competentes tomen medidas urgentes para restablecer la seguridad y permitir la normalización del transporte en la zona afectada.