Dos nuevos sismos de magnitud 6,4 y 5,8 en la escala sismológica de Richter, sacudieron este lunes alrededor de las 8 p. m. (hora local), la provincia turca de Hatay, una de las más afectadas por los seísmos del pasado día 6 de febrero que han dejado más de 44.000 muertos.
El movimiento telúrico de 6,4 grados se habría presentado a 12 kilómetros de la costa mediterránea; su epicentro fue en la ciudad Antioquía, aunque se sintió a 200 kilómetros al norte, según reportaron países vecinos. Reporteros que se encontraban en la zona, informaron que el temblor provocó pánico en los supervivientes alojados en las tiendas de campaña.
Entre tanto, las autoridades turcas alertaron por un posible tsunami y pidieron a la población alejarse de la costa, ya que el nivel del agua podría subir cerca de 50 cm. De igual modo, el ministro del Interior, Suleyman Soylu, en un comunicado televisado, solicitó a los residentes mantenerse alejados de los edificios afectados.
Por otra parte, la agencia turca de emergencias Afad, reportó tres personas fallecidas en Turquía; mientras que, 213 individuos fueron traslados al hospital; al menos un edificio que se encontraba averiado terminó por desplomarse; y en Siria se reportaron seis personas lesionadas.
Como medida de precaución, el hospital público de Alejandreta y el Hospital Universitario Mustafa Kemal de Antakya fueron evacuados, según informó la agencia de noticias DHA, y los pacientes que estaban en cuidados intensivos fueron trasladados a un hospital de campaña. Además, se evacuó el centro de coordinación de ayuda de Afad.
