La Policía española detuvo a cuatro jóvenes, tres de ellos colombianos, quienes son acusados de robar a homosexuales sus domicilios. A las víctimas las adormecían mediante sumisión química con potentes fármacos.
Según informaron este lunes fuentes de la investigación, los detenidos concertaban citas con las víctimas por medio de aplicaciones digitales de contactos.
Los tres colombianos fueron interceptados semana la pasada en el aeropuerto de Madrid cuando se disponían a viajar de regreso a Colombia, mientras el otro sospechoso fue detenido en Coruña, al noroeste de España.
Los hombres son señalados de los delitos de hurto, estafa, falsedad documental, lesiones personales y agresión sexual con penetración.
Sin embargo, los colombianos quedaron en libertad provisional por orden de dos jueces de Madrid, algo que resulta «incomprensible» para las fuentes consultadas por EFE, que remarcan el «evidente» riesgo de fuga.
Los investigadores de la Policía lograron esclarecer los hechos en un tiempo de récord, ya que la banda había llegado a Madrid a principios de febrero y habían adquirido los pasajes de vuelta para mediados de mes.
El ‘modus operandi’ era similar en todos los casos. El encargado de acudir al encuentro concertado en la residencia de la víctima se aseguraba previamente de que vivía sola con aplicaciones como Grindr o Tinder. Una vez allí, le suministraba diversos fármacos incapacitantes de la voluntad; posteriormente, los delincuentes aprovechaban para robarle dinero u objetos de valor. Incluso, en una de sus fechorías, habrían violado a un hombre.
Algunas fuentes señalaron que para cometer estos delitos eran utilizadas drogas muy peligrosas, que si se administran en dosis elevadas pueden causar la muerte.
