La economía naranja es el conjunto de actividades que de manera encadenada permiten que las ideas se transformen en bienes y servicios culturales, cuyo valor está determinado por su contenido de propiedad intelectual. Comprende lo relacionado con artes y patrimonio: artes visuales; artes escénicas y espectáculos; turismo y patrimonio cultural; material e inmaterial; educación en artes, cultura y economía creativa.
También relaciona todo lo de industrias culturales: convencionales; editorial; fonográfica; audiovisual agencias de noticias y otros servicios de información. Finalmente, lo que tiene que ver con las creaciones funcionales, nuevos medios y software: medios digitales y software de contenidos; diseño; y publicidad.
La participación del valor agregado de la economía naranja con respecto al valor agregado nacional se ubica en promedio para la serie en 1,9 %. La composición del valor agregado según las áreas que la componen es: industrias culturales 42,4 %, creaciones funcionales 34,5 % y artes y patrimonio 23,2 %. La composición del valor agregado según fuentes de información es: otras fuentes económicas 76,7 % y micronegocios 23,3 %.
Los segmentos del área artes y patrimonio presentan un crecimiento del valor agregado de 0,4 % para 2017 con respecto a 2016. Por su parte el valor agregado para 2018 presenta un decrecimiento de 5,5 %. Los conciertos, recitales y presentaciones de música en vivo, en espacios abiertos o cerrados, se encuentran en segundo renglón de asistencia con un 30 % para 2014 y 31,6 % para 2017, con una variación de 1,6 puntos, seguido por las fiestas municipales o departamentales con porcentajes de asistencia de 31 % y 28,8 % para los años 2014 y 2017, respectivamente.
De acuerdo con las cifras del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), en el departamento hay 22 bienes de interés cultural, ocupando el puesto 14 a nivel país. En cuanto a las salas de cine y sillas habilitadas, se tienen 5 y 830, respectivamente. En cuanto a las escuelas de música, el departamento es uno de los más rezagados con 20 donde sobresalen una (1) escuela musical de batuta; 7 privadas; y 12 municipales. En cuanto a las escuelas de conversatorios, comunitarias, indígenas, departamental, corregimiento y virtuales no aparecieron registros, según el DANE.
En Risaralda
A diciembre de 2018, los registros ante las cámaras de comercio del departamento de Risaralda daban cuenta de la existencia de más de 800 empresas, mientras que la Gran Encuesta Integrada de Hogares del DANE permite estimar que el sector genera aproximadamente 4000 empleos en el departamento. Un poco más de la mitad de las empresas de este sector están en el subsector de actividades profesionales, científicas y técnicas, donde se destacan las actividades de arquitectura y de diseño; en segundo lugar, las actividades de información y comunicaciones, destacándose el desarrollo de sistemas informáticos, pero con una nada despreciable cifra de 40 empresas en actividades de edición y producción audiovisual.
También en actividades artísticas y de entretenimiento se encuentran 94 empresas activas en los registros empresariales de Risaralda. A las cerca de 800 empresas mencionadas, habría que agregar las actividades relacionadas que desarrollan entidades sin ánimo de lucro, universidades, gestores independientes y otros actores que no tienen registro mercantil, lo que da cuenta de un sector con una actividad importante en Risaralda.
“Los 4000 empleos que reporta el DANE pueden ser una cifra conservadora, que debería crecer en el futuro si se promueve adecuadamente el sector a nivel local. Para esto es importante enfatizar en la formalidad (en todas sus dimensiones) y en la generación de conexiones que permitan acelerar el crecimiento agregado del sector en la región”, destaca un análisis de la Cámara de Comercio de Pereira.