En la madrugada del martes 28 de febrero fue capturada la influencer ecuatoriana Luisa Espinoza, de 26 años, en medio de un operativo realizado de manera conjunta entre Policía ecuatoriana y la Fiscalía, por el delito de pornografía infantil, según señaló la Fiscalía.
Durante los cuatro allanamientos, la Fiscalía confiscó tres computadoras y 10 teléfonos móviles, en los que se descubrió alrededor de 10.000 videos con imágenes explícitas de niños y adolescentes en actos sexuales.
La influencer conocida como Luisa E.P., es guayaquileña, es cantante de tecnocumbia y participó en un reality show en Ecuador; sin embargo, durante los últimos años se ha dedicado a crear contenido erótico para plataformas para adultos, principalmente en Onlyfans.
Esta no sería la primera vez que la mujer se ve involucrada en un escándalo por cargar videos sexuales a la web, pues en pasado lo hizo junto a otro youtuber ecuatoriano.
Incluso en diciembre de 2022, fue cuestionada por subir a las redes sociales un video en el que instaba a un menor a tocarle los senos a cambio de dulces, imágenes que se viralizaron rápidamente y fueron criticadas; dado que, estaba haciendo partícipe a un infante de una escena sexual con fines comerciales.
Ante la situación, Espinoza manifestó, “Yo no le hago daño a nadie, yo vivo mi vida, es mi cuerpo y no lo tiene por qué controlar otras personas. Me pueden decir de todo las personas frustradas, pero es mi cuerpo”.
En relación al video clip en el que aparece interactuando con un menor de edad, argumentó que esté accedió a tocarle los pechos, pero “no me lo comí”.
Por los hechos anteriormente señalados, la Fiscalía informó sobre la decisión del juez de dictar la prisión preventiva contra la creadora de contenido para adultos y otros dos detenidos, por el presunto delito de pornografía infantil.
Según el Código Integral del Ecuador, Espinoza podría enfrentar una pena privativa de libertad de 13 a 16 años; ya que, la legislación establece que la persona que fotografíe, filme, grabe, produzca, transmita o edite materiales visuales, audiovisuales, informáticos o de cualquier otro soporte que contenga la representación visual de desnudos o semidesnudos reales o simulados de niñas, niños o adolescentes en actividad sexual, será condenada a esta pena. En caso de que algún menor fuera familiar de la sospechosa, la sentencia se incrementa hasta 26 años.
