Revuelo generó la información suministrada por el Gobernador Víctor Manuel Tamayo Vargas, sobre la solicitud de una funcionaria del Ministerio de Salud, de retornar al Estado los recursos que dicha Cartera giró para la construcción del hospital de alta complejidad para el Eje Cafetero.
Ante esta situación, la Procuraduría General de la Nación (PGN), citó a una mesa de trabajo de urgencia para buscar salidas que permitan la continuidad del proyecto.
Para el Ministerio Público, el desarrollo de la megaobra reviste de gran relevancia y preocupación ya que están en juego inversiones por 600 mil millones de pesos, de un convenio interadministrativo firmado entre el Ministerio de Salud- aportante de los recursos- y el Departamento de Risaralda, entidad ejecutora del proyecto.
La diferencia entre las partes radica en un concepto negativo al aval técnico de Minsalud para echar a rodar la construcción de la Fase II del hospital, aduciendo “el reintegro de saldos de recursos que no se encuentren respaldando compromisos u obligaciones del presupuesto General de la Nación y girados a la Fiduciaria de Occidente”, lo que implicaría la desfinanciación del proyecto.
Ante esta situación, la Procuraduría Primera Delegada para la Vigilancia Preventiva de la Función Pública citó al Ministerio de Salud y a la Gobernación del Departamento de Risaralda para que se propongan alternativas que destraben la ejecución de las obras programadas.
La reunión se llevará a cabo hoy en las instalaciones de la Procuraduría General de la Nación en la ciudad de Bogotá. De la mesa también harán parte la Contraloría General de la República, la Defensoría del Pueblo y la Gerencia Integral del Proyecto.
Pie de foto: Actualmente del proyecto del hospital de alta complejidad en Risaralda, se está construyendo la primera torre que corresponde al área administrativa y consultorios, además del tratamiento de los hallazgos arqueológicos.