Antes de que finalice el presente año, serán puestos en servicio 39 kilómetros del corredor, que incluyen el mejoramiento de la vía actual, desde el sector de Tres Puertas hasta La Felisa, además del túnel de Irra, de 450 metros, un nuevo puente sobre el río Cauca, de 285 metros, y otro sobre el río Tapias, de 175 metros.
Aunque este proyecto tiene la mayor parte de obras en el departamento de Caldas, también generará un significativo impacto en Risaralda y Antioquia, ya que su construcción fortalecerá la conexión con el occidente del país y la salida al puerto de Buenaventura.
Manuel Felipe Gutiérrez, Presidente de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), este proyecto presenta un avance significativo y señaló que “con transparencia y equidad estamos sacando adelante estos proyectos, fundamentales para la conectividad del país. Estas obras son el resultado de un trabajo articulado entre el sector público y privado, por el bienestar de los colombianos”.
El túnel Tesalia
Dentro de las obras que se desarrollan dentro de este importante proyecto, se destaca la construcción del denominado Túnel de Tesalia.
Desde la ANI mencionaron que esta estructura, que se convertirá en la más grande de este tipo en el Eje Cafetero, tendrá una extensión de 3.4 kilómetros (km), y a la fecha registra un avance de excavación estimado del 80 %.
El túnel está localizado en la zona intermedia de la Cordillera Occidental de Colombia, y cuando entren en funcionamiento los 146 km, los usuarios se ahorrarán 45 minutos de recorrido entre La Pintada y La Virgina. Se estima que esta obra finalice en el primer semestre de 2020.
Hallazgos
En la zona de influencia del proyecto mencionado, se han encontrado piezas de patrimonio arqueológico. El concesionario ha dispuesto más de 70 personas para su recolección en cerca de 60 km a lo largo del corredor.
Es importante mencionar que todo el patrimonio arqueológico recuperado, está siendo cuidadosamente registrado, estudiado y conservado. Entre los elementos hallados se encuentran vasijas, piezas de metalurgia, restos óseos humanos y cajas con material cerámico, entre otros.
El estudio de estas piezas se realiza bajo la supervisión del Instituto Colombiano de Antropología e Historia y será guardado por una entidad avalada.
Tanto la ANI como el concesionario están comprometidos con salvaguardar la historia cultural.