Cinco hombres fueron ejecutados este lunes en el sur de Irán tras ser declarados culpables de narcotráfico, según informó una fuente oficial. Estos ahorcamientos se suman a una serie de ejecuciones relacionadas con delitos de drogas que han generado preocupación tanto a nivel nacional como internacional.
«Cinco malhechores y traficantes de drogas armados fueron ahorcados esta mañana en las prisiones de Bandar Abbas y Minab», declaró el jefe de la Autoridad Judicial de la provincia de Hormozgan, Mojtaba Ghahramani.
En lo que va del año, al menos 209 personas han sido ejecucionesejecuciones, principalmente por delitos relacionados con el narcotráfico. Estos datos han llevado a la comunidad internacional a expresar su preocupación por el elevado número de ejecuciones en el país.
Los cálculos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) indican que, en promedio, se realizan 10 ejecuciones por semana en Irán.
Por su parte, el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, denunció que es numer de ejecuciones es «espantosamente alto», por lo que mostró su preocupación por la situación.
Recientemente, tres hombres acusados de pertenecer a un cartel de distribución de cocaína, también fueron ejecutados en la república islámica del golfo Pérsico. A la lista se suman dos hombres por blasfemia y un disidente irano-sueco acusado de liderar un grupo separatista. Por lo que desde Washington y las organizaciones de derechos humanos han criticado estas actuaciones.
La preocupación por los derechos humanos en Irán es cada vez mayor; por esta razón, se espera que la comunidad internacional siga presionando al gobierno iraní para poner fin a estas ejecuciones y garantizar el respeto de los derechos fundamentales de sus ciudadanos.
