En medio de un clima de inseguridad e incertidumbre, seis importantes empresas mineras han decidido detener sus operaciones en Colombia. Agnico Eagle, Fortescue Metals, Barrick Gold, Royal Road Minerals, Iam Gold y Touchstone Gold se ven obligadas a frenar sus trabajos debido a diversos factores, entre ellos el desorden público, la conflictividad social, la alta carga fiscal y la falta de reglas claras de juego.
Los constantes episodios de violencia y altercados generaron un ambiente inseguro para el desarrollo de las operaciones mineras en diversas regiones del país. Además, esta inestabilidad se agravó por la falta de reglas claras de juego en las normas jurídicas relacionadas con el sector.
Asimismo, la alta carga fiscal impuesta a las compañías mineras contribuyo a la incertidumbre en el ámbito de inversión. El panorama económico y normativo poco claro ha llevado a estas empresas a replantearse su permanencia en el territorio colombiano. De hecho, se conoció que Agnico Eagle, Fortescue Metals, Barrick Gold y Royal Road Minerals están considerando abandonar el país si las condiciones no mejoran significativamente.

Por su parte, Juan Camilo Nariño, presidente ejecutivo de la Asociación Colombiana de Minería, manifestó que la inseguridad y la incertidumbre en cuanto a la inversión son los principales motivos que han llevado a estas empresas a considerar abandonar el territorio nacional si las condiciones no mejoran.
El líder gremial, quien se abstuvo de revelar los nombres de las empresas mineras por confidencialidad, indicó que estas realizaban actividades de extracción de oro y cobre en varios departamentos del país, como Antioquia, Caldas, Cauca, Nariño, Huila y Putumayo, por lo que el cese de estas operaciones ha significado una pérdida de inversión en Colombia entre los US$35 millones y los US$50 millones.
Hace algunos días, las mineras Zijin Continental y Mineros también enfrentaron problemas de orden público en sus proyectos. Zijin Continental en su proyecto aurífero de Buriticá, y Mineros con su tarea en El Bagre, ambos en Antioquia. Estos sucesos evidencian los desafíos que enfrentan las empresas mineras para desarrollar sus actividades en Colombia.
FRENARON OPERACIONES
En el último año, cuatro empresas mineras han decidido poner fin a sus operaciones en Colombia debido a la inseguridad jurídica y fiscal que enfrentan en el país. Según fuentes de la Agencia Nacional de Minería, Agnico Eagle, Fortescue Metals y Barrick Gold no contaban con los títulos necesarios para desarrollar sus proyectos en Colombia, por lo que buscaban establecer alianzas estratégicas con otras empresas que sí poseían dichos permisos.
Por esta razón, las compañías mineras han reducido o congelado sus inversiones debido a las complejas relaciones con las comunidades locales y los obstáculos legales en el sector minero.
“Sumado a lo anterior, el sector debe convivir con una política de gobierno que los golpea en el plano fiscal y operacional. Hay expectativas sobre la propuesta de la Ley de Nueva Minería, la prohibición de minería a cielo abierto, la suspensión de la titulación minera, la política de protección de la minería sin título y los nuevos requisitos ambientales que se le colgarían para obtener la licencia”, señaló Inés Elvira Vesga, socia de Holland & Knight.

Agnico Eagle, con sede en Toronto, Canadá, es conocida en el sector minero por sus acuerdos de inversión con Newmont Mining Corporation y Royal Road Minerals para actividades de exploración en Colombia y Nicaragua. Por su parte, Fortescue Metals, con sede en Perth, Australia, llegó a Colombia en 2019 para explorar y producir cobre.
Desde entonces, la empresa presentó 64 solicitudes de concesiones de exploración en áreas con potencial de cobre y oro en varios municipios del país como Algeciras, Gigante, Baraya, Hobo o Tello, en Huila, y Puerto Asís, Orito y Villagarzón, en Putumayo, también pidió permiso para hacer estudios en Nariño. Sin embargo, los movimientos de grupos ambientalistas y la llegada de la pandemia obligaron a la compañía a devolver los permisos y frenar sus operaciones.

Barrick Gold Corporation, multinacional dedicada a la producción de oro, con sede en Toronto, Canadá, que aterrizó en Colombia en el mismo año; es considerada por los analistas como la multinacional más grande del mundo.
Su portafolio está compuesto por el desarrollo de 23 complejos mineros en EE. UU., República Dominicana, Canadá, Australia, Argentina, Chile, Perú, Nueva Guinea y Zambia. Así mismo, la mitad de los volúmenes de extracción los obtiene de las tareas en EE. UU. y Canadá, el 25% de Australia, 19% de Suramérica, y el 6% de África.
En la actualidad, Barrick ejecuta varios proyectos de exploración en más de 15 países. No obstante, esta compañía ya no está en Colombia.
La lista de mineras que han decidido frenar sus operaciones en Colombia se amplía con la salida de las compañías Iam Gold Corporation y Touchstone Gold, por obstáculos legales y demoras en trámites que afectaron su normal desarrollo en el país.
Iam Gold Corporation, con sede en Toronto, Canadá, experimento problemas económicos y de insolvencia a nivel interno. Además, la operación que desarrollaban en Titiribí, Antioquia, fue detenida por un acuerdo del Concejo Municipal que prohibió las actividades mineras en la zona.
La minera señaló que el manejo de las normas mineras en Colombia es complejo y al acomodo de los entes municipales, los cuales gestionan ante los concejos Acuerdos para frenar la operación extractiva, así la Corte Constitucional con la sentencia 095 de 2019 lo haya prohibido.
Asimismo, la compañía recalco que, si bien la directriz ambiental en el país la dicta el Ministerio de Ambiente, las corporaciones autónomas regionales siguen las directrices de los alcaldes o gobernadores, lo cual perjudica el desarrollo normal de la operación minera.
El complejo minero para la producción a mediana escala e industrial de oro inició tareas en el 2010, pero hoy está en proceso de cierre.
NO DESCARTA CERRAR LA OPERACIÓN
Por otro lado, la minera Touchstone Gold, dedicada a la producción de oro y plata en Segovia, Antioquia, también se encuentra en una situación similar. La administración de la compañía no descarta cerrar la operación debido a la demora del Ministerio de Ambiente para avalar una solicitud de licencia que permitiría ampliar el proyecto.
Esta solicitud lleva más de 300 días, a pesar de que generalmente no debería demorar más de 100 días. La empresa busca hacer sostenible económicamente la operación a través de esta ampliación, pero las demoras burocráticas han generado incertidumbre sobre el futuro del proyecto.
CONTINUA, PERO CON VIGILANCIA
Entretanto, la minera británica Royal Road Minerals, que cuanta con proyectos en Antioquia y Nariño, ha expresado al sector minero del país que por el momento siguen en Colombia, pero han dejado claro que seguirán con mucha vigilancia y cautela para tomar decisiones en el futuro.
Royal Road Minerals, con sede en Londres, Reino Unido, y operaciones en Arabia Saudita y Argentina, es una figura relevante en el mapa de la industria minera en Colombia. En junio de 2021, la empresa recibió la aprobación de las autoridades para desarrollar los proyectos Güíntar, Niverengo y Margaritas en Anzá, Antioquia.
En ese momento, Tim Coughlin, director ejecutivo de Royal Road Minerals, destacó que la integración de nueva información geológica había definido objetivos prometedores en profundidad.
La minera británica concentra sus esfuerzos de exploración en los proyectos La Golondrina y La Redención, ubicados en La Llanada, Nariño.
La industria minera desempeña un papel fundamental en la economía del país, generando empleo y contribuyendo a la entrada de divisas. Por lo tanto, es vital para las autoridades tomar medidas efectivas para garantizar la seguridad y proporcionar un entorno favorable para la inversión en este sector estratégico, pues la decisión de estas compañías mineras ha generado preocupación en el sector.