Aquel 17 de enero de 2019, fue una fecha que cambió para siempre la vida de las 22 familias que fueron víctimas del atentado terrorista a la Escuela de Cadetes, General Santander de la Policía Nacional en Bogotá, suceso que al parecer fue orquestado por militantes del ELN.
Dos de esas familias pertenecen al departamento de Risaralda, una en Pereira, los Molina – Peláez y la otra en Belén de Umbría, los Rodas – Agudelo, tras estos hechos estas y las otras 20 familias afectadas han venido solicitando que se les escuche en aquellas peticiones que se tienen y con las cuales se pretende clarificar los hechos sucedidos aquel día y si en realidad la barbarie de este hecho pertenece al ELN.
Encuentro con el presidente
Jhon Diego Molina, padre del cadete Diego Alejandro Molina Peláez, indicó a este medio que se logró concretar que dos integrantes de las 22 familias afectadas pudieran hacer parte del encuentro con el presidente Gustavo Petro, en representación de todas ellas ante el Gobierno nacional, lo que se busca es que exista verdad, justicia y reparación, donde a través de las declaraciones que entregue este grupo al margen de la ley, se pueda conocer cual es la verdad, si habían personas internas de dicha institución involucradas, que hayan permitido el ingreso del vehículo con el material explosivo, pues ha sido llamativo en el caso el acceso tan cómodo que se presentó para dicho automotor.
Lo que se pretende con la inclusión de los representantes de estas dos familias en las mesas de diálogo, es conocer de primera mano lo que tienen para decir los voceros del ELN, para lo cual el presidente tomó nota, si bien esta situación aún no sido definida, el encuentro con el primer mandatario se pudo realizar también a través de la gestión de la Unidad Nacional de Víctimas, inclusión en las mesas, es lo que esta buscando en primera medida.
