La película muestra la visión que tiene Eslava de su padre, quien apenas contaba con dos años de edad cuando Cáceres murió en un ruedo en Sogamoso.
Pepe Cáceres vive una cruel infancia. Su padre le deja la huella del miedo y la muerte al suicidarse. El día que Pepe se encuentra con unos toreros, descubre su pasión y decide seguir ese camino. Pepe conoce y trabaja para Melanio Murillo en un espectáculo cómico taurino, donde éste lo explota sacando provecho de su inocencia y talento. Pepe deja a Murillo, y en un acto de coraje, impresiona a Ernesto Gutiérrez y al veterano matador Félix Rodríguez quiénes lo preparan para viajar a conseguir su sueño a España.
En medio de su entrenamiento, se enamora de Luz Marina que lo pone en conflicto entre su pasión y el amor adolescente. Pepe viaja a España y en su debut en Málaga, es corneado. Pepe debe superar la herida y los fantasmas de su infancia si quiere lograr ser alguien tanto en la vida como en el ruedo. Finalmente consigue la fama y vuelve a Colombia a recuperar el amor. Pero la vida siempre lo pone entre el amor y la ambición de dejar un eterno legado.
Esta es la historia del largometraje dirigido por Sebastián Eslava que aborda la vida de su padre, José Humberto Eslava, mejor conocido como Pepe Cáceres, considerado como la primera figura colombiana en el mundo de la tauromaquia. La película muestra la visión que tiene Eslava de su padre, quien apenas contaba con dos años de edad cuando Cáceres murió en un ruedo en Sogamoso.
Con una omnipresente figura paterna, que en ese entonces el país idolatraba de manera unánime, Sebastián creció entre fotos, trofeos, recortes de prensa y armarios con trajes de luces y trastos de torear del único matador de toros colombiano en tomar la alternativa en la Maestranza de Sevilla, y también en encontrar la muerte en los cuernos de un toro al que debía matar en el ruedo, ante una plaza llena de público. Las imágenes de su sepelio, aún conservadas en cintas tres cuartos en los archivos de los noticieros de la época, dan testimonio del impacto que supuso su muerte, “Tragedia nacional”, según los recortes de prensa del 17 de agosto. Una multitud se acercó a despedirlo en la Plaza de Toros, agitando pañuelos blancos y gritando “¡Torero, torero!”.
La del torero sucedió el 19 de julio de 1987, cuando Pepe Cáceres, con 30 años de carrera profesional, volvía a encabezar el cartel de la Feria del Sol y del Acero, en La Pradera de Sogamoso, plaza de toros que él mismo había inaugurado, como tantas otras, dos décadas atrás, el 20 de julio de 1968.
Rico, famoso, con edad de merecer descanso o jubilación por el alto riesgo de su oficio, ninguna necesidad tenía de ganarse la vida arriesgándola.
La cinta
Sobre la decisión de hacer esta película el director comenta: “Hace algunos años emprendí un viaje para estudiar actuación en Los Ángeles, sin dejar de lado el recuerdo de mi padre al que solo pude imaginar a través de las historias que mi madre me contaba. Mientras estaba lejos y sentía la gran ausencia de ese hombre extraordinario al que nunca conocí, decidí empezar una investigación sobre su vida, tal vez siendo ésta la única forma de llenar el vacío que me dejó, reviviéndolo y encarnando sus pasiones y deseos (…) Surgió entonces la idea de hacer una película de la apasionante vida de mi padre, en la que se cuenta la historia de un hombre condenado a ser un ‘don nadie’ debido a las circunstancias de su infancia, pero resuelto a transformarla a cualquier costo. Del abandono y del maltrato, supo saltar a la grandeza desde su condición de torero en la plaza y de ser humano en la lucha diaria”.
La producción
Esta es una producción de Resilience Pictures, en asocio con WideAngle Films, con el apoyo del Ministerio de Cultura, Caracol Televisión, Del Llano Alto Oleico, Blond Indian Films, 2.35 Digital y Diptongo Media Group, distribuida en el país por Cine Colombia desde el 19 de enero. Cuenta con las actuaciones de Eslava (en el protagónico), Valeria Galviz, Sara Casasnovas, Leyniker Valderrama, Cristian Restrepo, Manuel Navarro, Laura Garcia, Rosario Montaña, y Luis Fernando Hoyos (actuación especial), entre otros.
Con la dirección de Sebastián Eslava y Camilo Molano Parra, también participaron David Pombo y Florence Ortiz Coste como primer y segundo asistente de dirección respectivamente, Ivan Palomino como script, Ezra Axelrod en la música, Mateo Guzmán como director de fotografía, David Parra como DTI, Estefania Baquero como data manager, Giovanny Osma como gaffer, Carlos Eduardo Lopera “Chubby” como director de sonido, Gersson Guerrero como microfonista, Carlos Osorio como diseñador de producción, Stephanie Hansen como decoradora de set, Alejandra Cañón como jefe de utilería, Daniela Rivan como diseñadora de vestuario, Natalia Prada como diseñadora de maquillaje y pelo, Hugo Vidarte como jefe de producción, Alejandro Romero como coordinador de producción, Vicente Jimenez como jefe de locaciones, Elizabeth Trejos como coordinadora de transporte y Maria Juliana Casadiego como directora de casting.
El rodaje se realizó en locaciones de Bogotá y Honda, en la finca donde jugaba de niño José Humberto Eslava: “Fueron unas locaciones llenas de mística, de una sensación muy poderosa (…) “las partes de España también las rodamos aquí en Colombia, donde convertimos a Bogotá y sus alrededores en Sevilla”, expresa el codirector, Camilo Parra.
La película es distribuida por Cine Colombia.