Leo Trejos
No sería posible continuar siguiendo con nuestros planes curriculares, los viejos conceptos pedagógicos y proyectos de aula después de un hecho tan trascendente como la pandemia creada por el COVID 19, la cual generó rupturas y conflictos académicos y en cada una de las familias, tanto de alumnos y profesores, todo esto conllevando también a la crisis de orden económica que desencadenó en el descontento social y político de las protestas que mostraron la indignación de los tiempos de PARO…una prueba fehaciente del desgaste de los modelos industriales y capitalistas que por poco colapsan sus imperios.
Como formadores humanistas y quienes vivimos para contar la misma historia con nuestros alumnos, vemos cómo apelaron en medio de la crisis a las humanidades y la cooperación en rescate del hombre del siglo XXI.
En general la educación, puso de nuevo a revalorar el papel de las artes apostando su mira en ella como uno de los medios didácticos más utilizados por la gran mayoría de los docentes de cualquier área y nivel de educación. Todos recurrieron al dibujo, la pintura, el vídeo, la fotografía y en si a los medios audiovisuales, creando modelos sincrónicos y asincrónicos, que permitieron desarrollar otros tipos de pedagogías y didácticas que han cambiado nuestro pensamiento como docentes formadores que en la soledad de un modelo de aislamiento nos dimos a la tarea de resignificar la escuela.
La educación artística al poder aproximarnos a la realidad de nuestros alumnos en estos momentos transcendentes, donde el país y la ciudad y el mundo ha pasado por una crisis global, y en el nuestro un estallido social del cual se crean muchos imaginarios y malas interpretaciones que conllevan al desvío de la información. Es necesario confrontar a los estudiantes con sus universos y diversidad de lenguajes simbólicos y estéticos, entendido este último como el descifrar el conocimiento sensible por medio de sus talentos, como en la música, danza , teatro, fotografía o la pintura, en espacios amplios y murales como es nuestro caso en la institución educativa San Nicolás de la ciudad de Pereira, donde en grados séptimos uno y dos , a través de la historia de diferentes artistas nacionales e internacionales especialistas en pinturas de gran formato , así como muchas de las dinámicas visuales y los diferentes elementos plásticos que encontramos en las paredes de nuestra ciudad y el barrio se describen y registran las otras realidades que ocurrieron en los últimos tiempos en la ciudad, el país y el mundo.
Nuestro proceso de diseño básico y pintura mural ha tenido como características el poder hacer un recuento de sus historias y sensibilidades traducidas en formas y colores, Llegando a consensos y acuerdos para plasmar en una pared del colegio sus inquietudes, en un gran esfuerzo de poder poner en concordancia sus ideas. Solidaridad, disciplina y arte en una puesta en escena para los demás integrantes de la comunidad educativa San Nicolás. Una muestra del desarrollo de su percepción visual y conocimientos en color, forma, claro oscuro y composición. Así mismo nuestra posición crítica en un mundo que exige la reflexión expresiva.
Este año escolar el dedicarnos al estudio de la técnica mural, sus autores y diversidad refleja ese cambio de resignificar el aula de clase, reflexionar por medio de la educación artística como acto libertario, una apuesta por aquellos que dieron su vida por ideales, como muchos de los retratos y obras de los grandes artistas que hemos estudiado, no sirve el arte sin contexto, por ello llegamos al consenso que LUKAS VILLA y su lucha nos representa, como para los muralistas Mexicanos Orozco, Siqueiros, Rivera, representó Pancho Villa la lucha de los desvalidos, el Guernica para Picasso o para el Maestro Mario Méndez las aves representativas de la región en nuestro puente Helicoidal. Comunidades como la de San Nicolás, en tiempos de estallido social, fue centro de resistencia y lucha dónde much@s de nuestros alumnos salieron a la defensa de sus derechos en las primeras líneas, de recordar una de las trifulcas protagonizadas en el centro del barrio con un contingente del SMAT quienes amedrentaron y ultrajaron a jóvenes estudiantes de la universidad tecnológica de Pereira, a algunos exalumn@s de nuestra institución un grave atropello a la libre protesta y hecho de vulneración de los derechos humanos.
Por esto y mucho más nuestro proyecto retrata la justa lucha desde la visión escolar. Una representación de lo que no se nos puede olvidar, la muerte de inocentes y la valentía de unos pocos han dado hasta la vida por reclamar lo que es justo, lo que nos pertenece la dignidad y la libertad y la paz.
Nuestra muralística es la muestra de la capacidad inmensa de las artes y en este caso la pintura de gran formato, que nos ayuda a liberar nuestras capacidades.