Gonzalo Gallo Columnista Un día una bella tacita le habló un día a un joven impaciente: ¡Yo no siempre he sido esta taza que sostienes ahora! Hace tiempo sólo era un montón de barro amorfo y un alfarero se dedicó a amasarme y le dije: “No más, déjame en paz”, pero él replicó: “Aguanta un...