Gonzalo Gallo Columnista Un barquero trasladaba pasajeros en su bote. Cierto día un engreido y solemne profesor alquiló sus servicios . Quería que lo transportara a la orilla opuesta de un ancho río. Al comenzar el cruce, el erudito preguntó: ¿El viaje sería muy movido? -Eso depende tal vez según…- le contestó Nasrudín….