Maritza Salazar Velasquez Columnista Cada mañana, a la par que preparaba mis ropas, alistaba el antifaz que usaría para ir a trabajar. Ninguno en la oficina se percató de su existencia, tenía matices del color de mi tez; ahora que lo pienso bien, hacía parte de mí, de lo que fui o de lo que…