Este año preocupa particularmente, pues se ha observado que durante las elecciones locales es cuando esta violencia aumenta. La tendencia histórica se mantuvo, según la cual los liderazgos entre más locales sean, son objeto de una violencia más letal.
El informe anual de violencia contra líderes y lideresas políticas, sociales y comunales en 2022, elaborado por el Observatorio Político Electoral de la Democracia de la MOE, analiza la violencia política ocurrida durante el año pasado. El panorama de esta violencia política, no generó otra cosa diferente a la preocupación, porque se observó una tendencia en ascenso con 589 hechos de violencia contra líderes y lideresas. El 2022, se ubicó como el año con más agresiones desde la firma del Acuerdo de Paz con las FARC.
El 2022 constituyó un año de especial relevancia en términos electorales para el país. No solo fue el escenario de realización de las elecciones de Congreso de la República y Presidencia de la República, sino que por primera vez, se eligieron a los 16 Representantes a la Cámara por las Circunscripciones Transitorias especiales de Paz (Citrep), panorama electoral que tiene implicaciones en la violencia contra los diferentes liderazgos del país.
Las cifras con detenimiento
Las amenazas se posicionaron como la agresión más recurrente con un total de 225 registros, 84.4% más que en el 2018. En cuanto a la violencia letal, se registraron 176 hechos (104 asesinatos y 72 atentados), de los cuales el 35.2% estuvieron dirigidos a liderazgos de carácter social y el 31.3% a comunales.
A razón de la ‘política de izquierda’, 48 líderes y lideresas fueron amenazados a través de panfleto que no dan a conocer la razón para la misma, 16 al ser catalogados como ‘responsables del asesinato de líderes sociales’, 12 al ser señalados de ‘falsos líderes sociales’, 5 por apoyar la política de Paz Total, 5 por dificultar el accionar de los grupos armados ilegales, 5 por no apoyar la candidatura de Gustavo Petro, 4 al ser acusados por ‘mal manejo de recursos’, 3 por impulsar la erradicación de cultivos ilícitos y 3 por contrariar a un partido político en el concejo municipal.

Comparativo para Risaralda
Con base en que el Cauca, entre 30 departamentos, es el que ocupa el primer lugar en este tipo de violencia: 73 amenazas, 2 secuestros, 9 atentados y 13 asesinatos. Risaralda con 6 amenazas y un atentado, ocupa el puesto 22 en el país y está por debajo de Caldas que aparece en el 20, mientras que el Quindío ocupó el lugar 26, con la diferencia de que allí y en Caldas, sí se materializaron asesinatos.
El informe también hace énfasis en el contexto específico de la ruralidad del país, pues presenta una violencia diferencial. A diferencia de la generalidad nacional donde los líderes y lideresas políticas fueron las más vulneradas, seguidas por las sociales y finalmente las comunales, en la ruralidad ocurrió lo contrario.
Es así, como en agosto de 2022, después de que se conociera que en Risaralda, varios líderes habían recibido amenazas y que de estos, aproximadamente la mitad fueron víctimas de hostigamiento, Eisenhower Zapata hizo visible que en las cifras oficiales no estaban incluídos los líderes que no denuncian por temor a represalias por parte de las bandas que se dedican al microtráfico y a los préstamos gota a gota.
Dato
Ante cualquier hecho de violencia las autoridades locales son quienes deben garantizar la protección de la vida de los líderes y lideresas, según el decreto 2252 de 2017.
Violencia por tipo de liderazgo
Por liderazgo político fueron 46 las amenazas durante 2022, según este reporte. 27 amenazas por liderazgo social y 6 por liderazgo comunal, y se materializaron 4 asesinatos a razón de los dos últimos.
Contra las mujeres
- Las lideresas políticas más afectadas corresponden a congresistas electas con un total de 20 agresiones, entre ellas 2 atentados, concejalas electas con 14, candidatas al Congreso de la República con 8 y exfuncionarias o excandidatas con 7 hechos. En cuanto a la ubicación geográfica de los hechos de violencia contra las lideresas, estos tuvieron lugar en 48 municipios de 20 departamentos del país.
- Hay que precisar que las lideresas sociales tienen diferentes roles y no siempre desempeñan un liderazgo específico, su actividad puede dirigirse a distintos objetivos, por lo que se logró identificar que entre las lideresas hubo 9 víctimas indígenas, 6 víctimas afro y 3 víctimas campesinas. Estos grupos concentraron el 75% de las agresiones frente a los liderazgos sociales.
Cifra
51.6% de los casos de violencia registrada en el país, tuvo como objetivo a los líderes.