Mariana Suárez Guarín
El artista plástico Diego Reyes, lanzó su primera exposición ‘Arte objetual’, donde plasma toda su sensibilidad y a través de objetos tan sencillos como tapas, hierros, tornillos, cueros, plásticos, calaveras, crea novedosas obras de arte. Las piezas están exhibidas en la sala Carlos Drews Castro.
Diego Reyes, nació en 1975 en Pereira, tiene 47 años de edad, se crío entre el campo y la ciudad, recuerda que en el colegio logró ganar por dos años consecutivos el premio de la feria de la ciencia y el arte, y desde siempre ha tenido en su mente ser artista, explorar y explotar su talento para crear obras manuales, con la fusión de varios objetos como calaveras, cráneos, huesos frontales de ganado vacuno, entre otros, que recupera y de los cuales se idea obras fuera de lo común. Antes de dedicarse de lleno a sus obras de arte, Diego se desempeñó en otros campos, con algo en común: la vida y la muerte. Ha viajado por Suramérica, estudió tecnicatura en Agronomía en Argentina, es técnico auxiliar de enfermería una actividad que desempeñó con la idea de servir a la gente (otra de sus vocaciones), desde este sector estuvo en el área de urgencias hospitalarias por 4 años, luego pasó a aprender y desempeñarse como agente de tránsito por 5 años, oficio del que se retiró recientemente para enrutarse en su verdadera pasión que es el arte, y aunque es autodidacta y empírico en este, gracias a su sensibilidad persistencia, resistencia, dedicación, sacrificio, horas de trabajo sobre todo en las noches porque es noctámbulo, y algunas laceraciones en sus manos, quiso exponerlas para la gente. “Mis obras las he ido puliendo desde hace muchos años y se me presentó la oportunidad de mostrarlas públicamente y han sido un éxito. Se trata de 11 piezas donde imprimo mi creatividad, mi talento y al mismo tiempo mi sensibilidad y sello, donde cada composición es una mezcla de objetos reciclados, cráneos de animales (en estado de descomposición), materiales orgánicos, minerales y otros objetos que me encuentro en la calle, que compro o me regalan, los transformo, les doy vida, algunos son elementos fuertes, delicados, y sentimientos que evidencian, luz, oscuridad, fragilidad, fuerza, un poco de color, forja, madera, denominada como retro futurista, y es un arte objetual porque tiene el concepto de objeto, cada pieza evidencia unos lenguajes de vida, muerte, agresión, ternura y dinamismo, yo interactúo con los objetos”.
Proyectos
El artista desea llevar sus obras a otros espacios y regiones. “La idea es llevar mis obras a otros lugares del departamento de Risaralda y otros espacios, nunca creo una obra pensando en la subasta o en la galería, lo hago bajo la sensibilidad, el deleite de la contemplación con ayuda de curadores”.
De la reciente obra denominada “Devorando los hilos del tiempo”, el artista confesó que se la hizo especialmente a un amigo y en esta quiere dejar un mensaje de reflexión sobre el tiempo. “En esta pieza se evidencian unas fauces secas de un gran pescado, donde está incrustado un reloj mediano y hay una conexión eléctrica con otras piezas y desechos de materiales, del que se desprende un atrapa sueños; y el significado es un llamado a la reflexión sobre la esclavitud que genera el tiempo”, indicó el artista.