Historia de vida con Adríana Rivera

Adríana Rivera es una mujer encantadora que posee una sonrisa hermosa y un brillo en la mirada que revela cuán enamorada está de la vida.
Esta pereirana es madre de Juan Daniel José y Maria Paula a quienes se refiere como herencia y bendición de su vida. Se describe a sí misma como una mujer con una gran vocación de servicio y una gran sensibilidad social.
Economista de profesión, especializada en alta gerencia y gerencia de proyectos, magíster en Gestión de la Innovación y candidata a magíster en Gerencia de Proyectos de la Universidad EAFIT.
Laboralmente se ha desempeñado en el sector financiero, como vice contralora municipal en Pereira, coordinadora a nivel regional y nacional de proyectos de cooperación internacional con la agencia gubernamental para los Estados Unidos, así como proyectos de impacto social, empresarial y la dirección gremial y refundación de la asociación colombiana de micro, pequeñas y medianas empresas de occidente.
La “Prueba De Vida”
El 22 de marzo Adríana cumplirá 10 años de haber sido diagnosticada con un tumor en la zona bulbomedular de su cerebro, todo comenzó con un fuerte dolor de cabeza, que asumió como algo propio de la vida que llevaba y el estrés que le generaban sus compromisos, sin embargo el dolor se intensificó al punto de verse obligada a acudir al especialista, recibiendo una noticia inesperada, desde ese momento inicia un proceso doloroso, inesperado y traumático en su vida que la llevó a enfrentar una discapacidad en su totalidad porque después de la intervención que debía hacerse pero donde no aseguraban si lograría sobrevivir a ese procedimiento y además nadie se comprometería con las secuelas de la intervención entre las cuales estaba quedar en estado vegetativo.
Sobrevivió a la intervención pero perdió la funcionalidad de su cuerpo en su totalidad y quedó postrada en una cama, perdió la fuerza, la motricidad, la coordinación, el control de esfínteres, no podía deglutir la saliva. Sin embargo al tiempo iniciaba un proceso de transformación, sanación y catarsis con una serie de aprendizajes y enseñanzas que decidió compartir a través de su libro “Prueba De Vida”

La promesa a Dios para pasar la prueba.
El punto de partida para este proceso de superación ha sido su fé en Dios porque de manera deliberada decidió entregar su vida a Él, soportandose en todas las promesas que están consignadas en la Biblia, libro que considera un manual de vida. De allí nació la fuerza y la esperanza de que saldría de lo terrible de su situación en ese momento.
Hace muchos años Adriana estudia la palabra de Dios en la Biblia y a través de la oración frecuente encontró la forma de anclarse a una esperanza firme, sumado a un gran esfuerzo personal, a un decidido compromiso con su rehabilitación en sus tres dimensiones del ser espíritu, alma y cuerpo.
De la postración total a la gratitud de una nueva oportunidad de vida.

Para esta mujer no ha sido fácil recuperar su vida, pero su presente es la gratitud con todas las personas que la han acompañado. Familia, amigos, líderes espirituales y por supuesto un equipo interdisciplinario que desde sus profesión, vocación y oficio hicieron lo mejor para que pudiera salir adelante. y en ese sentido Adríana ya perdió la cuenta de cuantas especializaciones de la ciencia de la salud ha conocido además de los procedimientos complementarios que han aportado a su bienestar.
Todavía tienen una serie de limitaciones y secuelas como estar en la silla de ruedas, pero ella sigue con la fé firme en su proceso, confiando que así como Dios le ha permitido recuperarse de manera milagrosa ella seguirá comprometida con sus terapias.
Aunque ha retomado los roles de su vida como madre, profesional y estudiante hoy por hoy no abandona sus ejercicios de equilibrio, fuerza, sensibilidad y coordinación.
El propósito, un mensaje de esperanza.
“Quiero que el lector comprenda que somos personas que estamos expuestos al dolor y al sufrimiento, que lloramos y nos derrumbamos y por eso en el libro muestro mi fragilidad y humanidad, no busca para nada mi exaltación, no tiene un fin autobiográfico. Lo que yo quiero es exaltar el nombre de Dios y enseñarle a las personas que la resiliencia espiritual existe y que uno puede superarse de cualquier situación, que la vida puede sorprendernos con giros bruscos e inesperados pero con todo y eso Dios nos ha dado capacidades extraordinarias para sobreponernos y aflorar de nosotros lo mejor”
El libro “Prueba de vida” de la autora Adriana Rivera le permitirá conocer una hermosa experiencia que le otorgará herramientas para mantener una actitud proactiva y resiliente ante la adversidad, fortalecer la autoestima y la confianza personal y desarrollar desde la perspectiva espiritual la capacidad para perdonar y tener paz interior como camino ineludible a la perfección del ser humano.