La reparación de luminarias después de cada diciembre que se acaba el contrato con la alcaldía de Pereira, se vuelve un viacrucis para la comunidad, porque aunque desde la Secretaría de Infraestructura se toman medidas temporales, como una cuadrilla que se encarga de ir a atender los reportes que los habitantes de varios sectores de la ciudad hacen a una línea que ellos se encargan de promocionar, las soluciones no son tan efectivas.
Así es el caso del barrio La Unidad en la comuna Bostón, allí no ha sido posible que les reparen ocho luminarias que se encuentran defectuosas, cinco de ellas desde enero ubicadas a la entrada del barrio y dos más desde hace menos tiempo pero que también afectan a los residentes de la manzana G, la que está ubicada frente al río.
El barrio tiene dos entradas, una para los vehículos y el transporte público y la otra unas escaleras que terminan en la ya mencionada manzana, ahí está la otra lámpara que quedó fuera de servicio. La última buseta baja a las 8:00 p.m., lo que quiere decir que pasar a pie es la única opción si no hay dinero para taxi.
Inseguridad solo inseguridad
Los vecinos se encuentran muy preocupados y no es para menos, porque los atracos han aumentado notablemente y se dio hasta el caso de una joven que por poco y es asaltada sexualmente, si no es porque otros peatones pasaban en medio de la oscuridad cuando la escucharon gritar.
Hay que recordar que la manzana G está frente al río Consota donde se encuentran los puentes colgantes sobre el Consota, que dan hacia la invasión de la finca Buenos Aires y Rocío parte baja.El problema se acrecenta porque el pasto, tanto al lado del andén, como a los lados de las escalas está muy alto y es propicio para que los malhechores se escondan y esperen el momento en que los incautos pasen después de las 6:30 en que ya está todo totalmente en penumbra. Se consultó al secretario Milton Hurtado, para saber si está próximo a salir el contrato de alumbrado público, pero no ofreció ningún tipo de respuesta.
¿Cómo ve esta situación?
Sandra Alzate – presidente JAC
“En repetidas ocasiones hemos llamado e ido a Infraestructura a solicitar que las arreglen y hasta ahora ha sido imposible, aunque toman datos y todo, porque en el teléfono jamás lo volvieron a contestar”.
Lina Marcela Pulgarín – habitante del sector
“Vivo en la manzana G y pasa mucha gente, la verdad yo no bajaría caminando. La policía viene por acá ya por la última, como que les da miedo será”.
Henry Antonio Giraldo – habitante del sector
“Soy de la primera manzana de arriba y hasta ahí llega la oscuridad. En el día es controlable y nosotros mismos le hemos hecho mantenimiento al pasto, pero ahora está muy alto”.
Javier Cano – habitante del sector
“40 años aquí y es el mismo problema, cuando no es que se roban el cable es otra cosa. A uno lo que le preocupa son las mujeres que son más indefensas”.
