La semana pasada se cumplió un año de haberse aplicado la primera vacuna contra el Covid en el Departamento. Desde entonces, según registros entregados por las autoridades de salud de Risaralda, se han puesto 1.581.276 dosis, lo que coloca a esta región a la cabeza de las que han logrado mayor cobertura en vacunación.
Este dato significa también que el 85% de la población de Risaralda ha recibido al menos una dosis y que de aquellas cerca de 720.000 personas, es decir el 74%, cuentan ya con el esquema completo, un registro que se interpreta como el haber alcanzado ya la llamada inmunidad de rebaño.
Las preguntas que muchas personas se hacen es si no hubieran tardado tanto los científicos y los laboratorios para producir masivamente la vacuna y en llegar al país y a la región, cuantas vidas se hubieran ahorrado y si hoy no se estuviera completando un año del inicio de la vacunación masiva, cuando risaraldenses más hubieran perdido la batalla contra el coronavirus.
Según un informe de la secretaria de salud del departamento, desde que se inició la pandemia han fallecido en Risaralda cerca de 2.500 personas; sin embargo, de no haber llegado la vacuna y de no haberse logrado el alcance que hoy se tiene, los resultados mortales serían por lo menos del doble.
Por supuesto, la vacuna, como lo han expuesto tantas veces los expertos y conocedores de este complejo tema, no inmuniza contra al virus ni elimina y ni siquiera disminuye la posibilidad del contagio. Lo que hace el biológico es reducir los efectos, especialmente los letales, del virus y aligerar sus graves secuelas en los contagiados.
De aquí que hoy se diga de manera muy generalizada y coloquial que el covid no se ha ido, que sigue pescando a los descuidados; pero que es una gripa fuerte que da y que hay que aprender a manejar. Y en el fondo hay razón para esto; sin embargo, gracias a la vacuna y de no haber sido por ella, otra cosa se estuviera diciendo del virus.
La mejor prueba de todo esto es que, de acuerdo con lo que han dicho las autoridades de salud, nueve de cada diez personas que ingresan a las Unidades de Cuidados Intensivos de los centros de salud del departamento, nueve no han recibido ni siquiera la primera dosis del biológico.
No hay duda, pues, de que la vacuana ha sido definitiva valioso en la lucha contra el coronavirus y que de no haber sido por ella hoy el balance de la pandemía sería desolador. Por todo, el llamado es a vacunarse, a que los padres de familia lleven a sus hijos pequeños, que es la población que falta por recibir la dosis, a que se la apliquen, y en general a que todos entiendan que la vacuna es vital para enfretar y ganarle definitivamente la batalla al Covid.